Por: Leovani Garcia OlivarezBrasil se apresta a concluir un 2014 complicado, debido a dificultades económicas que propiciarán un crecimiento cercano a cero de su Producto Interno Bruto (PIB), pero sin afectar los programas y recursos de sectores sociales.En este año de la Copa Mundial de Fútbol y los comicios generales, la producción industrial registró declive y la economía en general reportó apenas avances.En su más reciente pronóstico el Banco Central informó la víspera que el país cerrará diciembre con un alza del 0,2 por ciento, 0,5 puntos porcentuales menos que la anterior previsión realizada al final del tercer trimestre de este año.Tal pronóstico está por encima de la expectativa del mercado financiero, que esta semana fijó en 0,13 por ciento la expansión del PIB.Desde marzo pasado la entidad monetaria comenzó a bajar la previsión de alza de la economía, la cual de un 2,3 cayó a un dos por ciento, después descendió a 1,6 por ciento en junio pasado y en septiembre se deslizó hasta el 0,7 por ciento.De confirmarse este vaticinio, la elevación del PIB será la peor desde 2009, cuando la nación, afectada por la crisis internacional, registró un 0,33 por ciento de ascenso económico.La moneda local (el real) comenzó a depreciarse hace seis meses y a pesar de la intervención del ente monetario principal, su valor se devaluó en cerca de un 20 por ciento y se cotizó ayer a 2,70 unidades por cada dólar estadounidense.La divisa norteamericana cerró la víspera con un alza del 1,64 por ciento, lo que motivó que el billete brasileño se tasara en 2,7045 unidades.Analistas de mercado señalaron que la caída de la demanda global de las materias primas, la subida de la inflación en el país y el descenso de la confianza de los inversores conllevaron a una inestabilidad de la moneda nacional y su devaluación.La reelecta presidenta Dilma Rousseff prometió a partir de enero próximo medidas drásticas para retomar el crecimiento de la economía, pero sin afectar los programas sociales.Vamos a prepararnos para organizar la casa y tener en 2015 una recuperación del crecimiento, subrayó el lunes sin ofrecer detalles de las acciones que se impulsarán en su segundo mandato.Al referirse al Programa de Sustentación de la Inversión (PSI), que crea estímulos para diversos sectores con líneas de aportes financieros diferenciados, señaló la posibilidad de eliminar el subsidio a algunas empresas.A pesar de estos inconvenientes, la tasa de desempleo en el país se mantiene estable, con un 4,8 por ciento de parados, mientras la renta media de los trabajadores avanzó en noviembre pasado un 2,7 por ciento con respecto a igual mes de 2013 y pasó de dos mil 91 reales (800 dólares) a dos mil 148 reales (826 dólares).El salario sigue su crecimiento y según la propuesta de presupuesto para 2015, este se incrementará en un 9,1 por ciento a partir de enero y llegará hasta 799 reales (300 dólares).La continuación asimismo de los programas sociales como Mi Casa, mi vida, Brasil sin Miseria y otros, garantizarán asimismo la disminución de las desigualdades y nuevas oportunidades para asegurar un mejor nivel de vida de sus ciudadanos, según voceros del gobierno.